«Barlovento parecía tan sorprendida como ellos. Era una casa de estilo mediterráneo de una sola planta, en la que se repartían el living, la cocina, el lavadero y dos dormitorios. Se encontraba situada literalmente en medio de la arena, a una cuadra del mar y algo alejada de la ciudad. Su fachada blanco tiza estaba maltratada por el viento y las viejas persianas de madera se apoyaban vencidas sobre los marcos de las ventanas. Alguna vez habían sido verdes»
Compuesta por una asombrosa recopilación de cuentos, algunos a `partir de los ya publicados en el blog, Natalía Doñate nos presenta una extensa serie de sorprendentes finales construidos, las más de las veces, a partir de hechos cotidianos a lomos de una escritura accesible, además de una lectura fácil, ideal para esperar en compañía de calidad los minutos que anteceden la llegada del sueño.