Para aquellos que aún disfrutan del calor veraniego, para calmar la sed con mis mejores deseos.
¿Alguna vez les conté de mi abuela María, jienense de por la parte de Huesa, población sita allá en la orillas del Guadiana Menor y rodeada de olivos hacia la parte más llana y con la sierra de Cazorla a sus espaldas, que elaboraba un gazpacho de limón que era una refrescante delicia culinaria? Pues les paso la receta, en una fuente profunda se machaca un diente de ajo hasta provocar su segura desaparición, se vierte un vaso de aceite, de los de vino; el zumo colado de un limón y sal al gusto, se bate y se rebate ésta mezcla hasta que emulsiona. Y se añade, poco a poco, un litro de agua muy fría mientras se continua dale que dale, más, agite usted más que quedará mucho más rico. Aparte se trocean en dados abundantes el pan duro y las verduras: pimiento, pepino, cebolla y tomate que se…
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